Un rostro juvenil es el anhelo de muchas personas, en especial mujeres, que suelen optar por miles de productos artificiales, que a veces pueden producir alergias o dependencia. Por ello, nada mejor que lo natural, sobretodo cuando viene de la mano de algo tan accesible en nuestras vidas. Ya no hay excusa, combata las arrugas usando perejil y tomillo.
Con perejil:
- Por la mañana, ponga un buen puñado de hojas de perejil en una taza de agua fría. Deje macerar durante todo el día y aplique el resultado en la noche, ayudándose de una mota de algodón.
- Aplicado en el rostro, es un excelente disimulador de arrugas.
Con Tomillo:
- Hierva un puñado de tomillo en abundante cantidad de agua. Cuele el resultado y colóquelo en un frasco con spray. Así, podrá rociarlo en cuello y escote.
- Verá que es un magnífico tónico humectante.